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La limitación en los movimientos corporales supone un ataque frontal en la calidad de vida de algunas personas. Existen algunas enfermedades que afectan al sistema nervioso que origina un movimiento más frecuente o, por el contrario, los ralentiza o los reduce. Algunos como el Parkinson son más conocidos por parte de la sociedad, pero existen muchos otros como la ataxia, la enfermedad de Huntington o el síndrome de Tourette que son más desconocidos y que se van a abordar como parte de los trastornos del movimiento más habituales.
¿Quieres saber más sobre estos trastornos del movimiento? Continúa leyendo este post.
El objetivo principal de la rehabilitación de cualquier lesionado medular o que padece cualquier trastorno del movimiento, es la de intentar en la mayor medida de lo posible mejorar su autonomía y reducir al máximo su dependencia. De esta forma, consiguiendo su mayor autosuficiencia se logra un bienestar que va más allá de lo físico. El trabajo que realizan perfiles como el terapeuta ocupacional se hace por tanto, imprescindible para estos pacientes. Por ello, son muchos los profesionales que han puesto el foco en esta profesión como una oportunidad de profundizar en una profesión apasionante y enriquecedora a nivel profesional y personal. Si es tu deseo acceder a este sector, te recomendamos que consultes el master en terapia ocupacional aplicada de Euroinnova. Una ocasión de acceder a una formación íntegra y diseñada por los profesionales más cualificados del sector.
Los trastornos del movimiento se originan por defectos en la base o en determinadas áreas del cerebro. Y es que, son consideradas afecciones neurológicas. No obstante, estos trastornos del movimiento pueden producirse por algunas causas como:
Los trastornos del movimiento suponen una reducción en los movimientos o su ralentización; o bien, pueden provocar la repetición de movimientos tanto de forma voluntaria como involuntaria.
Teniendo en cuenta esta base, se podrán determinar como más habituales los siguientes trastornos del movimiento.
La ataxia es un trastorno del movimiento que consiste en perder el control de la coordinación de los movimientos. Por lo tanto, las personas que padecen ataxia, llevará a cabo movimientos descoordinados. Del mismo modo, también puede afectar esta coordinación al equilibro o el habla entre otros síntomas. Las causas de la ataxia se centra en trastornos genéticos o degenerativos, aunque también pueden ser provocados como consecuencia de una infección.
La distonía es uno de los trastornos del movimiento que provoca la contracción involuntaria de los músculos y provoca movimientos repetitivos de torsión. Se podrá con la distonía afectar a todo el cuerpo o a partes concretas.
La corea afecta sobre todo al rostro, la boca, el tronco o las extremidades y se caracteriza por provocar movimientos irregulares, repetitivos, breves y acelerados.
La enfermedad de Huntington es de tipo hereditario y degenerativo. Estos trastornos del movimiento se caracterizan por provocar movimientos sin control, enfermedades de tipo psiquiátrico y la aparición de problemas cognitivos.
La atrofia multisistémica es de tipo degenerativo, ya que, provoca un deterioro progresivo de algunos sistemas del cerebro. Estos trastornos del movimiento pueden derivar en ataxia o parkinsonismo, aunque también pueden originar una pérdida del control de la vejiga o la bajada de la presión arterial.
El mioclono provoca sacudidas involuntarias a gran velocidad. Entre sus causas están la ingesta de determinados medicamentos, la epilepsia, la insuficiencia renal, la demencia u otras causas de tipo genético.
De los trastornos del movimiento, la enfermedad de Parkinson es la más conocida. Sus efectos se evidencian en la pérdida del equilibrio, la rigidez muscular, la reducción del sentido del olfato, o el deterioro de la cognición entre otros.
Los conocidos como tics se engloban en estos trastornos del movimiento. Y es que esta enfermedad provoca la repetición de movimientos o la emisión de sonidos que salen de lo habitual. El segmento de población más propenso a padecer este síndrome serán los niños y adolescentes.
La enfermedad de Wilson es un trastorno del movimiento de origen hereditario que tiene su causa en un excedente de cantidad de cobre en el cuerpo. Consecuencia de ello, de esta enfermedad pueden generarse problemas como distonía, temblores, ataxia o parkinson.
Seguramente muchos de los trastornos del movimiento de este post son desconocidos para la mayoría. Y es que, son poco frecuentes algunos de ellos, pero no por ello, requieren de una menor atención, sino por contra, son muchos los profesionales que ponen el foco en ellos para contribuir a mejorar el bienestar de estos pacientes que los padecen.
Consecuentemente, hacer frente a unos trastornos tan complejos y con unas características tan definidas, requiere por parte de estos profesionales, de un conocimiento con un componente vocacional. Al respecto, los cursos de terapia ocupacional online de Euroinnova han sido diseñados con este propósito con el compromiso de los profesionales más cualificados del sector que mantienen un contacto directo con su realidad. De esta forma, se aportará al alumnado una perspectiva realista, motivadora y cualificada que será útil en el desempeño de esta profesión y como elemento diferenciador en un mercado laboral que demanda una cualificación específica.
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